POEMANÍA
la manía del poema…
Hoja literaria de aparición virtual
Nº 56/2006
“La poesía es un problema de lenguaje. Toda
intención, todo propósito debe encontrar en ese
terreno su forma distintiva...”
Osvaldo Rossler
Poeta invitada: EVANGELINA ARROYO (*)
Estados (III).
“vale más encontrar a medianoche
una fantasma visible
que afrontar en el interior-
ese huésped más helado”
(Emily Dickinson)
éramos la brújula
desorbitada
en la arena de silencio
teníamos la piel
excesivamente
rotunda
insular
para que ningún doliente
nos imaginara a medias
y nos fuimos
porque la mañana
era mucho más cruel
que cualquier puerta escondida
mucho más muerte
que toda la casa
Estados (IX).
“… y en mis ojos criaturas vestidas…”
(Federico García Lorca)
en mera palabrería
se ha ido el hilo de la trama
habrá que acostumbrarse a vivir
como un puñado de silentes
sin ditirambos
como la puesta en escena
de todo acto huérfano
de toda idiotez resonante
por favor
que alguien interprete
esta comedia genuina
que nadie mueva de lugar
este escenario
para emerger
no más guiones ni tragedias oxidadas
Estados (XII).
“Que la canción los salve del destierro”
(Lily Canals)
la lluvia prometida
no era para nosotros
había que aprender
el grito intermedio
el canto ajeno
había que reprimir
la emergencia de lo vital
la mirada escéptica en madrugada
estábamos
tan seguros de la extinción
que elegimos
fosilizar la amargura
en un instante
Puertas.
(sobre “Mandala”, de Miguel Cámpora)
hay un mandala que gotea y abastece la orilla
desde otro deseo
una guerra continua entre aflorar y no aflorarse la palabra
como triste bestiario devorando espejismos
parece que las fieras prolongaran la histeria
parece que el círculo no duele
porque la tormenta y el poema yerto
puertas que siguen ahí para gemir en excesivos mantras
puertas para volver las cosas a su muerte
El que no fue.
huye de casa a las seis
como siempre
su mujer con vicios de loca
-pero también de abeja reina-
cruza de vereda porque nadie
intenta decir buen día
a pesar del sol y las barajas
camina despacio
hoy tendrá que romperse los ojos
-pero el egoísmo, la espera-
entonces para qué la filosofía de bolsillo
la camisa dentro del pantalón
o las frases de inútil cortesía
un cretino a tiempo completo
un fanático sin partituras
nunca sabe el mantra
la obstinación mediocre
nunca sabe la estrella
de cualquier circo repetido
Con la noche al cuello.
estoy nebulosamente fuera del mundo
la cruz es la misma
y el corazón a media asta no sirve
porque intuir el mundo
en cada revelación de amores
es inútil todavía
alguien abrirá su mano desde la penumbra
a traición
a vientre habitado y cenizas
sabe nuestra esquina de carnaval perverso
nunca más beber este blues
y el cuerpo tibio en la tormenta
fruta roja descarnada en los labios
Declaración de urgencia.
alguien dijo el fuego que nos roe
la palabra feroz
vino a salvarnos del diluvio
por eso hablamos el amor
en estados de coma indefinidos
por eso nos vuelven los hechizos del ocaso
que debimos padecer
nos dejaron en tristeza de escultura
a medio terminar
nos mintieron acerca de la sombra de los días
ahora
no perdonamos
el fusil
contra la lengua:
no queremos otro cielo sin ángel
Noche de pájaros.
“Desnazca sobre el mundo la noche.”
(Blas de Otero)
por los amores que albergué en la palma del sueño
por cada rumor de nubes construido a la altura de mis ruinas
concedo esta noche de pájaros
mi obituario
mi semblanza
y que hable la semilla triste que agita hasta la empuñadura
(*) Evangelina Arroyo: nació en la ciudad de San Nicolás (Buenos Aires, Argentina) en 1983. Participó de talleres de literatura, como así también en distintos ciclos culturales como cafés literarios y recitales poéticos. Si bien no ha editado un libro personal aún, su obra fue recogida parcialmente en diversas antologías y distintos medios gráficos y de la web. Reside en su ciudad natal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario