POEMANÍA
la manía del poema…
Hoja literaria de aparición virtual
Nº 181/2009
“Si bien el poeta ciertamente es un bicho raro,
lo es por sus limitaciones y no porque
escriba poemas.”
Francisco Urondo
Poeta invitada: PAULINA JUSZKO (*)
Con la luz precaria de cada día
bajo un techo que nos protege precariamente
amanecemos
ponemos en marcha un cuerpo precario
repetimos actos cuya reiteración promete
perdurabilidad
(falacias / espejismos)
cada cual con su Morgana a cuestas
hasta que Átropos corta el hilo y ahí comienza
la verdadera eternidad
no la que añoramos sino la temida
la que mezcla paralelas
la que resuelve antinomias
***
No puedo entender esta cosa
esta cosa de abrir los ojos cada día
cada día pensando en el programa del día
día igual o diferente de los otros días
otros días quizás de vino y rosas
rosas de octubre que pulverizaron las pupilas de Pizarnik
Alejandra que prefirió no abrir más los ojos
ojos que aborrecen abrirse a lo mismo
lo mismo multiplicado ad infinitum
infinito espejeante de promesas
promesas de diferencia
diferencia que sin embargo sobrecoge mi corazón
un corazón mecánico que tampoco puedo entender.
***
Hemos gestado gritos y parimos susurros
¿Por qué empecinarnos si el canto del gallo
en fijar ya no despierta
con palabras ecos
las arenas en nuestros corazones
del tiempo encallecidos
en la negación?
De ahora en adelante
erraremos por los museos
al acecho de mendrugos de vida
deslizando entretejiendo
manos dedos ávidos
por las curvas en las cabelleras
como frescos toboganes
Y el mármol será más real que la carne.
Naufragando perdidos rememorando
en el vacío sin angustia antiguas ciudades
de negras bocas en jardines del futuro
aullantes de horrendas delicias
No habrá ya otro refugio
que estas gigantescas placentas donde
palpitaremos
a veces
al ritmo de lo universal.
***
Nada de nadie, nadie de ninguno pidió nada,[1]
dijiste.
Y yo digo:
Todo de todos, alguien de cualquiera
pidió cualquier cosa.
Diversos modos de matar el tiempo
que no queremos matar.
Atarse.
Desatarse.
Así se vive, se permanece, se vegeta, se está, se es, se transcurre
(o como quiera llamarse a este trabajo ).
Hacemos los deberes como podemos.
Algunos necesitamos cola
para no perdernos en el espacio,
para remontarnos lindo.
Pedimos vientos propicios,
reclamamos un cielo azul,
las correspondientes nubecitas viajeras.
Que alguien o algo recoja el hilo cuando hace falta.
Ya no todos los chiches, nos conformamos con algunos:
Ritos.
Anclas.
Contrapesos.
[1] Jorge García Sabal, Sutura.
***
Hay noches en que
como los recolectores que descubren
diamantes perdidos en la basura
milagrosamente
entre los restos de mí misma
encuentro una chispa de vida.
La veo brillar
empecinada y absurda
en un revoltijo heterogéneo.
En medio de la podredumbre
de los abortos
de las sobras
lanza resplandores insólitos
llenos de gracia.
Es una sobreviviente
una náufraga
¿cómo ha podido abordar estas playas...?
***
Lo quiero igual que usted me quiso a mí, de a trozos.
Dante Bertini, Salvajes mimosas.
Frase que define el amor humano.
Y yo aquí,
una mañana en que tantas cosas se despiden
discretamente,
sin alharacas,
en un rincón que destila
la mansedumbre del otoño incipiente.
Olas de amor fragmentado me depositaron aquí.
Último puerto.
Finis orbis.
Contemplo.
Recojo migajas de violentos festines.
¿Es poco?
¿Es mucho?
No lo sé.
Pero intenso, luminoso y cálido.
Intensidad que no desequilibra.
Luz que no enceguece.
Calor que no consume.
***
Como negras letras sobre un muro encalado
como el sello sobre una encomienda
como gristaconeo sobre asfaltogris
como la parada del 273
como la mirada matinal que presagia la náusea
como la sirepana de la fabricuela o la camparena de la escuébrica
como un ojo dentro de un triángulo
cuya superficie hay que calcular
deduciendo el ojo
como patéticas mónadas de Leibnitz
vagando por el espacio
en irremediable tangencialidad
como la diabólica tapa de aquel Billiken
con sus imágenes encadenadas
ad infinitum ad infinitum ad infinitum ad infinitum ad infinitum ad infinitum ad infinitum a
así
***
Estamos aquí
y la nostalgia es nuestra única herencia
una maraña de sueños fallidos nos va sofocando.
a veces / durante un minuto /
siempre y jamás dejan de ser vacías cortezas
el unicornio se escapa del tapiz
viene a mirarse en nuestro espejo
alguien
después de habernos buscado largamente
se detiene ante la puerta
hay días en que /
se camina sin vacilar
días en que /
los tréboles huelen a infancia.
***
Mimado
hostigado
pulido en recovecos y excrecencias
tigre en acecho
fiera insidiosa irritable
presta a retobarse en cualquier momento
a mostrar las uñas
a decir basta no sigo
a devorar al domador
explorado en superficie cotidianamente
- nada más extraño -
imprevisible / aterrador
(aterrador por lo imprevisible)
incensado en spasgimnasiosquirófanospasarelas
glorificado en himnos de genuflexa sumisión
tirano gozosamente aceptado.
¡Oh Dios mío / y tan poco mío! no me abandones no me abandones
sé sutil pero resistente
pluma de acero ora pro nobis
robot exento de colesterol ora pro nobis
rolex ultrasincronizado ora pro nobis
Barbie deportiva y tersa ora pro nobis
¡Bello-bello-bello
es el Señor de nuestros tiempos!
***
Lances en la capilla de las canossianas
Ton souvenir en moi luit comme un ostensoir!
Charles Baudelaire, Les fleurs du mal
Mínima blancura / pureza máxima irradiando solar en medio de la penumbra
engarce de oro para tanto albor
y en medio del silencio un perfume de claveles / azucenas / nardos
(cuando todavía perfumaban
cuando aún bodelerianas las flores se evaporaban cual incensarios).
Y en medio de la soledad presencias misteriosas frecuentando la ausencia
identidades ambiguas
(porque no era la misma hostia de los recortes guardados en los bolsillos para jugar
a la comunión
o las “cercenaduras” que el sacristán le regalaría mucho más tarde a su Cristinica
era lo mismo y no
de pronto no: Él la habitaba).
Y en medio de los rezos fijaba la vista en la custodia
sin pestañear
seguramente vería su rostro
(porque ella era buena / tenía fe / podía compararse sin desmedro a cualquier santo)
¿por qué a mí no?
¿por qué a mí no?
Y en medio de la adoración un duelo sin cuartel
estábamos enfrentados en la penumbra / en la soledad y el silencio / entre rezos
musitados
mis ojos te atravesaban con dardos de súplica.
Y en medio del mareo / de la náusea nacían serpientes que se deslizaban sobre los
reclinatorios:
la Frustración de cabeza gacha y ojos llenos de lágrimas
el Resentimiento áspid agresivo de mirada llameante y corazón insatisfecho
la Envidia enroscada sobre sí misma y mostrando su silbante lengua
la Soberbia reptil de belleza incomparable
las cuatro serpientes capitales tomando posesión de su presa.
***
(*) Paulina Juszko: Paulina Juszko nació en La Plata y reside en Villa Elisa (Bs.As.). Se desempeñó en tareas docentes en la Dirección de Psicología y Asistencia Social Escolar (Pcia.Bs.As.) y en la Alianza Francesa de La Plata, donde también dirigió el Petit Théâtre (grupo vocacional). Obra publicada: Poemas del Yo dios y Chant posmoderne son obras juveniles, editadas por la autora. En 1995, Ediciones de La Flor publica su primera novela, Te quiero solamente pa bailar la cumbia. En 1998 su novela Esplendores y Miserias de Villa Teo obtiene el 3er premio del Fondo Nacional de las Artes y es publicada por Simurg en 1999. En 2000, Ed. Biblos publica su ensayo El humor de las argentinas. En 2005 aparece Vivir en Villa Elisa, obra de carácter testimonial declarada de interés cultural por la municipalidad de La Plata (Libros de la Talita Dorada). En 2008 se publica en la Ed.Dunken, la novela El año del bicho bolita. Entre sus inéditos se cuentan tres novelas en las que abunda la sátira sociopolítica, el humor negro y el grotesco, una novela policial y otras obras decididamente humorísticas; un libro de poemas; dos piezas de teatro; etc. Ha dado conferencias sobre diversos temas relacionados con la literatura y participó como panelista en varios Encuentros de Escritores, internacionales y nacionales. Colabora con artículos en la prensa regional y se desempeñó como jurado en diversos concursos literarios. Ha sido traducida al italiano y al ruso. En 2005 condujo con el poeta José María Pallaoro la audición cultural La Talita, por FM Radio Parque de Villa Elisa. En 2007 tuvo a su cargo la columna literaria de la audición La Marca, en FM Difusión de Berisso. Actualmente es columnista de la audición El Altillo, FM Keops de Villa Elisa. En 2006 recibió el Premio Virtud a la Ética, el Trabajo y la Solidaridad, otorgado por la Fundación Principios y el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Asesora al grupo de teatro comunitario Arturo Seguí a la Elisa Bell en la puesta de espectáculos inspirados en el libro Vivir en Villa Elisa (2007/2008).
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