POEMANÍA
la manía del poema…
Hoja literaria de aparición virtual
Nº 225/2010
“Es preciso no estar en sus cabales para que un hombre aspire ser poeta;
pero, en fin es sencilla la receta.
Forme usted líneas de medida iguales, y luego en fila las
coloca juntas poniendo consonantes en las puntas.
¿Y en el medio? ¿En el medio? ¡Ese es el cuento!
Hay que poner talento.
Ricardo Palma Soriano
Poeta invitada: GABRIELA DELGADO (*)
ADOLESCENTE
En mi adolescencia
los ojos más tristes eran imanes.
Redentora de heridas mal ganadas.
Barro tu camino, apartando las piedras
sin darme cuenta de que mis pies
sangran en retaguardia.
El huracán me lleva
soplando fuerzas
hasta el límite de mis manos.
PROFECÍA
Puede predecir la noche
en el vuelo de los pájaros
a contramano de la brisa.
Un augurio de sombras
en el dintel de la puerta
ensayando llaves.
Jadea la marea su presagio
de errantes arenas.
Siente el desenlace
en la mirada vidriada
de su espejo.
Conoce la profecía
tallada en la loza del sepulcro.
Mientras la ignore
no será cierta.
NOSOTRAS
Las Hembras ponemos la palabra y el cuerpo,
el coraje, la paciencia, la caricia, el pan, las manos
y no hacemos del amor un juego.
Nos reconstruimos cada día, aun desde las ruinas.
Desangradas, cicatrizamos en jazmines.
Las Hembras sabemos de cobardes retiradas.
Las hemos visto muchas veces en miradas esquivas,
en silencios agazapados, en estocadas gratuitas.
Las Hembras caminamos de frente, embestimos la vida.
A veces, la magia hecha esquirla nos hiere de muerte.
Es allí donde todo lo que sentimos
no vuelve a traspasar la piel ni la frontera.
(No siempre creer vale la pena.)
Las Hembras ponemos la palabra y el corazón,
aunque no se vea.
Y sin explicarnos por qué, o por dónde,
siempre llegamos.
Siempre.
TRUENO
La palabra me traga en su mentira.
Llueve silencio.
Empantanadas las letras
gritan su idioma dislocado.
Imprecisas garabatean
lícitas palabras.
No hay indulto
para el grito rebelde
que ensordece.
Trueno del infierno.
OSARIOS
Aquí sólo un osario.
Tierra arrasada.
El aire huele a blanca bandera
Manchada con sangre.
La razón, montada
Sobre el instinto de los chacales.
Los huesos de una mano
Apuntan al cielo.
¿Por qué nosotros?
Al otro lado un osario.
Tierra arrasada.
El aire silba una sinfonía de duelo.
Tanto odio tejiéndose
En la hebra de los siglos.
Erupción de volcán casi premeditada.
Una cañavera llora el destino sobre la greda.
¡Por qué nosotros?
En otro continente
Un niño pregunta:
¿Por qué?
Escribe su inocente canta de paz
Sobre una pajarita de papel.
VAN GOGH
Una flor blanca
enraíza esa porción de tierra
que ha sido removida.
Cada día con más fuerza
extiende sus brazos
tapizando de verde el entorno
justo hasta le cordón dibujado con piedra.
Siembra botones, reflejos de cielo,
aromas.
No hay más ojos allí
que lo de las aves
aseverando el milagro.
Semilla es el corazón de un hombre.
En el centro de un pecho mudo
las raíces han hecho su nido.
La muerte no se atreve,
ha dado vida.
DESHABITADA
Imagino que la casa ya no será la misma.
Este verano los damascos sembrarán
el patio sin una mano que los cobije
y la parra, sin su poda de otoño,
entregará vides vacías.
Los cristales empañados de grises
ya no reflejan verdes en al cocina.
El fogón aromado de pan recién hecho
sólo esparce cenizas.
El reloj marca un tiempo sin pasos.
En el desván, olvidada, una caja de fotos
se abraza a un pasado de rieles.
El espejo ha de haber perdido la sonrisa
frente a la sombra.
Una húmeda fatiga se niega
a ser exorcizada con sándalo.
La casa está vacía.
Dos manos y un vaso de vino
deshojan el eco de la risa.
La casa está sola.
Quien la habita ha elegido el destierro.
(*) Gabriela Delgado: nació en Buenos Aires (Argentina). Pertenece al Grupo de poesía “PRETEXTOS”. Codirige el Café Literario “Buenos Aires Poesía” (desde 2006). Codirige el Encuentro Latinoamericano de Poesía “Reunión de Voces” (desde 2006). Publicó las siguientes plaquetas: Collage interior, Azul eclipse, Milagros y melancolías, Treguas cotidianas, Ventana al olvido y Entre nosotros; además posee un libro de foto-poemas: Perfiles del alma. En coautoría: Pasajeros del penúltimo tren (2007) y Ronda de Pretextos (2007). Tiene editados tres poemarios: “AguaLuna” (2002); “Destinatario” (2005) y “La vida es otra cosa” (2008). Ha obtenido numerosos premios por su labor poética e integra varias Antologías en Argentina y España.
1 comentario:
Gabriela Delgada es una poeta excelente!!
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